miércoles, 14 de octubre de 2020

Serra da Estrela Riders Challenge. Portugal.

Definitivamente, todas las pruebas de este fatídico año que se fueron aplazando en los meses pasados, han quedado suspendidas, y veremos a ver como se retoman en 2021…Afortunadamente, hay gente buscando alternativas, con propuestas como el “Serra da Estrela Riders Challenge”, en Portugal, donde se proponía a los participantes el desafío de completar tres etapas, correspondientes a tres rutas diseñadas por las carreteras que rodean la Serra da Estrela, incluyendo la subida por tres vertientes distintas a Torre, el punto más alto del Portugal continental (1.993 m). Para cada ruta se fijaba un tiempo máximo, haciéndolas cada uno con total autonomía y en cualquier momento dentro de una ventana de dos meses (del 18 de agosto al 18 de octubre), realizando el registro de datos y su validación a través de GPS y Strava.

Nada más ver el planteamiento, vi que era “excusa” suficiente para volver a La Serra de Estrela, sin duda la zona más mítica para el ciclismo portugués, con el atractivo añadido de “competir” de alguna manera para cumplir los tiempos establecidos,  aprovechando que  el Puente de la Hispanidad caía dentro de las fechas para poder realizarlo, y sobre todo, porque mi mujer nunca me pone inconvenientes para viajar a Portugal. Así, decidí hacer la inscripción, gratuita, por cierto.




El destino, la ciudad de Seia, lugar de salida de dos de las rutas,  estando el punto de inicio “casualmente” exactamente en el cruce donde teníamos el apartamento que habíamos pillado, lo que facilitó bastante las cosas.

Llegamos el Viernes 9, que también  era festivo en Jerez, y llevaba en mente hacer una ruta extra más, para completar todas las subidas posibles a Torre, ya que a las tres planteadas por la organización del  Serra da Estrela Riders Challenge, puede añadirse la de la vertiente de Unhais da Serra, que ya hice en 2014. Pero lo cierto es que el viaje se hizo largo y viendo que  iba a estar muy justo de tiempo, tuve que desistir y esperar a la mañana del Sábado para comenzar lo establecido en el reglamento.

Decidí comenzar por la Ruta Oeste, que con inicio en Seia, iba a buscar la subida a Torre por Manteigas.


El inicio, con algo de fresco, dirección a Gouveia, ya picando hacia arriba, para entrar en el Parque Natural de la Serra da Estrela, y enseguida comenzar la subida al Puerto de Mondeguindo,  con 18 km de longitud, aunque muy tendido, salvo el primer par de kilómetros, lo que permite andar sin gran esfuerzo, disfrutando de la primera toma de contacto con el peculiar paisaje de la zona. 

Bajada hacia Manteigas desde Mondeguindo.
                                                                                                       


Una vez en la cima, descenso igualmente largo, hacia Manteigas, para inmediatamente comenzar a remontar el valle glacial del Zézere,  por una carretera prácticamente en línea recta, con pendiente media entorno al 8%, que obliga a esforzarse bastante. Tras un gran zigzag, se llega al cruce de la carretera que sube desde Covilha, ya con 15 km ascendidos para tras un descansito, afrontar la parte final del puerto.

Puente sobre el Río Zézere


Subida por Valle glacial del Zézere





Justo aquí es donde la Serra da Estrela resulta más espectacular, por los “caprichos” que se ha permitido la Geología en la zona…los grandes afloramientos graníticos, entre los que serpentea la carretera,  ofrecen unas vistas verdaderamente impresionantes.

Parte final subida a Torre


Al paso por el relieve esculpido en la roca de la “Senhora da Boa Estrela”, ya estaba todo prácticamente hecho, alcanzando los 1.900 m de altitud, y encontrando enseguida el desvío hacia Torre, para subir la última rampa de apenas 700 m, y llegar hasta la altura oficial de 1.993 m. La curiosidad es que las autoridades portuguesas para llegar a la altitud de 2000 m construyeron en la cima una torre de 7 metros, a la que posteriormente se añadieron las dos estaciones de radar que la caracterizan.

Cima de Torre


Tras la fotito, descenso muy rápido hacia Seia, salvo por el repechito al paso por Sabrugueiro,  para terminar con 101 km y 2.450 m de desnivel. La nota negativa es que el freno de disco trasero empezó a dar problemas, y llevo ya un par de meses así. El aceite se derrama, y no hay forma de dar con la solución.

En Seia. Casa do Vidoeiro.

Una vez descargados los datos del Garmin, pude comprobar que estaba en tiempo para conseguir el diploma de Oro, así que empecé a pensar en que ya que estaba metido en el lío, había que apretar en las siguientes rutas para terminar de lograrlo

.CLICK AQUÍ PARA VER RUTA: Serra da Estrela Riders Challenge. Etapa Oeste


Para el Domingo escogí la Etapa Sul, la más dura sobre el papel, con la subida a Torre desde Loriga.


Salí casi de noche, para estar de vuelta lo antes posible, sin ser muy consciente de lo que me esperaba ya que prácticamente todo el recorrido era inédito para mí. Pronto empecé la subida del primer puertecillo, que como es habitual en la zona, resultó bastante largo (12 km), pero muy llevadero, con rampas entorno al 4%, para llegar a Vide tras un descenso algo más pronunciado.

Paso por Vide

El segundo  puerto, del mismo estilo pero más largo aún (18 km) y combinando descansillos con alguna rampa dura, metido en un pinar bastante frondoso. En la cima, de bonito nombre: “Pedras Lavradas”,  desvío hacia Loriga, para después del descenso, iniciar el tercer puerto,  de solo 8 km, pero más constante, para coronar ya con cerca de 1.800 m de desnivel  acumulado.

Tras un descenso corto hasta Loriga, y unas primeras rampas para abrir boca, desvío para hacer la subida que llaman “Adamastor”, con una dureza que no me imaginaba para nada, en la que se sucedían tramos al 13 o 14%, y que de hecho, es considerada como la ascensión más exigente de Portugal. 


Subida a Adamastor


Fueron casi 9 km, que me hicieron pensar que sería imposible bajar de las 5 h:30 min, que marcaba el límite del “Oro”. Pero, por fin en el desvío hacia el tramo final de la subida a Torre, donde suaviza mucho, incluyendo un par de kilómetros incluso en descenso, pude recuperar, echando el resto para completar los 22 km de subida en total tras casi dos horas.



Quedaba volver a bajar a Seia, por el mismo sitio del día anterior, aunque esta vez no quise perder la ocasión de hacer una foto en uno de los lagos de origen glaciar que salpican la zona y tuve que tener más precauciones por el problema con los frenos.

Bajada hacia Seia

Llegué a Seia dentro del tiempo establecido, aunque por un escaso margen de unos pocos segundos si lo que hubieran computado fuera el tiempo total, en lugar del tiempo en movimiento. En total, 114 km y 3.000 m de desnivel.


Câmara Municipal de Seia

CLICK AQUÍ PARA VER RUTA: Serra da Estrela Riders Challenge. Etapa Soul



Para el final dejé la Etapa Este, más corta que las anteriores, pero igualmente por encima de 2.000 m de desnivel acumulado, por lo que me preocupaba en un principio no conseguir bajar de las 4 horas que se fijaban para el Oro.


La salida en esta ocasión desde Manteigas, para hacer la subida a Torre por la vertiente de Covilha, con mucho frío, al haber bajado considerablemente las temperaturas durante el fin de semana.

Los primeros kilómetros, favorables, hasta comenzar un pequeño puerto intermedio, que no supuso mucha complicación, y llegar en poco más de una hora a las inmediaciones de Covilha, esperando por delante 26 km de subida y más de 1.500 m de desnivel, y encontrando ya bastante dureza al atravesar por las calles de la propia ciudad.

Una vez ya en la carretera, la pendiente se estabiliza en torno a un 8%, por lo que no se puede ir muy cómodo, hasta alcanzar Penhas de Saúde, y unos 4 km después el desvío hacia Manteigas, por donde a la vuelta  bajaría.


Tramo final subida a Torre desde Covilha

De nuevo en el tramo final de la subida a Torre, repetición del final de la Ruta Oeste, comprobé que la situación en cuanto a tiempo estaba controlada, por lo que pude recrearme un poco en el paisaje e incluso parar en la “Senhora da Boa Estrela”.


“Senhora da Boa Estrela”

Enseguida, de nuevo estaba en el desvío hacia Torre, coronándolo por tercera vez en tres días.


Ya solo quedaba la bajada hacia Manteigas, echando un último vistazo al entorno, antes de volver a recorrer el valle del Zézare en sentido descendente, terminando sin complicaciones, a pesar de que los problemas con el freno de disco trasero fueron a más, y solo podía frenar con el delantero.




El tiempo, casi 15 minutos por debajo de las 4 horas establecidas, así que pude conseguir el Diploma de Oro definitivamente, con un tiempo total de 13 h: 58 min, resultando la experiencia bastante satisfactoria, si bien esperemos que cuanto antes puedan volver a celebrarse pruebas al uso en condiciones normales.

CLICK AQUÍ PARA VER RUTA: Serra de Estrela Riders Challenge. Etapa Este


Como comenté al principio, queda una cuarta ascensión a Torre, por Unhais da Serra, quizá la más desconocida por tener un tramo sin asfaltar. Tuve ocasión de hacerla en 2014, coincidiendo también con la Fiesta Nacional, saliendo desde Vide, por donde he pasado en esta ocasión en la “Ruta Sul”. El recuerdo es de una subida espectacular, de 20 km, con un primer tramo bastante duro hasta llegar a la tierra, donde suavizaba, enlazando en la parte final con la subida a Torre desde Covilha, ya pasado el cruce de Manteigas. El descenso, lo hice por Loriga, para completar 89 km y también más de 2.000 m de desnivel.

Subida a Torre desde Unhais da Serra. Tramo sin asfaltar.




Y con esto sí que parece que se pone punto final a esta atípica temporada 2020, en la que a pesar de todo, algo interesante se ha podido contar (Alpes Suizos, Pirineos Catalanes, Vuelta a Cádiz…). Esperemos que el 2021 sea mejor en todos los aspectos. Para empezar, se supone que estoy inscrito en las pruebas en las que lo estaba este año y que se han suspendido: Mediterranean Epic Gran Fondo, L'Ariégeoise Cyclosportive, o la Granfondo Sierra de Cazorla. Si se consiguen disputar, será buena señal…

































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