miércoles, 9 de julio de 2025

Pirineos 2025 (2). Rutas.

 



Como de costumbre en este tipo de viajes organizados anteriormente, el plan de rutas previsto era súper ambicioso, y además, tras ver qué el Tour este año, además de la etapa con final en Hautacam, hacía una cronoescalada en Peyragudes, y tenía otro final en Superbagneres, vi la opción de añadir una ruta más, para pasar por estos dos sitios, adelantando el inicio del viaje un día. 

Así, el miércoles 3 de Julio, tras recoger la furgoneta ,  cargar las bicis y los trastos de los cinco, nos pusimos en marcha dirección a Sabiñanigo, donde pasaríamos la primera noche, por cierto, no sé por qué, entrándonos ganas a algunos de hacer la QH el año que viene, je je.

"Monumento Cicloturista Quebrantahuesos". Sabiñánigo.

El Jueves muy temprano nos desplazamos hacia Loudenvielle, punto de inicio de nuestra primera ruta, recorriendo de inicio los 10 km de la cronoescalada del Tour hasta Peyragudes, para conectar después en la cima del Peyresurde con lo que sería la parte final de la etapa siguiente,  con paso por Bagneres de Luchon, ya engalanada para la ocasión, y final en Superbagneres.


Cima del Peyresourde.

Bagneres de Luchon

Aquí empezamos a comprobar la dureza de los puertos de los Pirineos, que sín rampas extremas, pero por la longitud y la pendiente constante siempre en torno al 8%, te van desgastando enormemente.




Subida a Superbagneres.

Se me hizo más largo que en 2016, cuando lo subimos después del Port de Bales, pero es que por aquel entonces no andaba yo mal.


Tras la bajada, de nuevo en Bagneres de Luchon, para subir de vuelta el Peyresurde, que pronto empezó a atragantarseme al surgirme de nuevo el dolor en el menisco de la rodilla derecha que me ha pasado factura en otras ocasiones.


Bajada de Superbagneres.


Esto lo había achacado al cambio de postura, al ir alternado gravel y carretera, pera está vez llevaba dos meses cogiendo exclusivamente la Terra y haciendo entrenamientos bastante duros sin molestia alguna, así que no entendía que me pasaba.

Lo pasé realmente mal para llegar a la cima, sobre todo a nivel mental, pensando en lo que me podía condicionar este problema el resto del viaje.

En la bajada nos cogió además una pequeña tormenta, y ya en el coche, un momento de nervios tras haber soltado las llaves y luego no recordar dónde...al final estaban dentro del casco y pudimos continuar hacia nuestro "campo base", el camping Le..., que nos sorprendió para bien.

Por la tarde, momento de relax en la piscina y de cuidar la rodilla a base de hielo e ibuprofeno.

CLIC AQUÍ PARA VER RUTA: Peyragudes + Superbagneres + Peyresurde

El viernes tocaba visitar el primer gran puerto mítico, el Aubisque, saliendo dirección Lourdes para echar un vistazo al Santuario, y  llegar hasta la zona de Laruns por carreteras secundarias, con algún repecho que otro, que ya hicieron que me volviera el dolor. 

Santuario de Lourdes.

Conectamos con la carretera del Aubisque en el km 2, y ya desde las primeras rampas, lo iba pasando regular. Pero sorprendentemente, poco a poco, el dolor fue remitiendo y en la parte final, animado además por las impresionantes vistas que se van teniendo, empecé a encontrarme mejor.



Subida del Aubisque

En la cima, foto obligatoria con las bicicletas del Tour, comentando con los compañeros, que posiblemente el Aubisque sea el Puerto más bonito que haya...

Cima del Aubisque

Tras continuar hasta el Soulor y gastarnos 15 € en agua en el bar de la cima, bajada por la vertiente de Arthez-d'Asson donde tiene su inicio el col de Spandelles, la principal novedad del viaje para mí y que tenía ganas de conocer al hacerse célebre por los ataques entre Vingegard y Pogacar en el Tour de 2022, y la caída de este último en la bajada.

Subida del Soulor

Cima del Soulor

Inicio Col de Spandelles

Resultó verdaderamente duro, con más de 800 m en 10 km, y con una carreterita estrecha de las que se agarran.

En el descenso, pendiente de ver si reconocía la curva de Pogacar, que debió ser la única complicada a izquierda que pasamos, para llegar al camping con 130 km y 2.800 m+...etapón considerable.

CLIC AQUÍ PARA VER RUTA: Aubisque + Spandelles

Nos habíamos propuesto volver a Lourdes por la tarde en plan turístico y así lo hicimos, encontrando que había una procesión mariana, resultándonos llamativo la gran cantidad de voluntarias participantes, aunque también sufrimos lo peor del viaje: la cena en un restaurante "regulero" donde literalmente nos comieron los mosquitos.

Para el tercer día teníamos previsto otra buena ruta, saliendo desde el Camping, pero finalmente decidimos recortarla, por reservar algo para el día siguiente, desplazándonos hasta Luz Saint Sauveur.  La salida,  dirección Gedre, iniciando directamente  la larguísima subida del Col de Tentes desde el Puente de Napoleón, sobre la espectacular garganta del rio Gavarnie.


Puente de Napoleón. 

Tenía especial interés en volver a subir este puerto, porque fue mi primer ontacto con los Pirineos  en 2012, pero pese a ya conocerlo, volvió a sorprenderme cada vez más conforme íbamos ganando altura.





Subida  Col de Tentes

Pese a que en la parte final, encontramos niebla y agua, los compañeros no dudaron en continuar hasta el final, y conseguimos coronar justo cuando un claro nos permitió ver las enormes moles de los "Hautes Pirineos" aún con restos de nieve. 



Cima Col de Tentes.

La bajada con la carretera mojada y bastante frío, y un pinchazo de Jesús, hizo que al paso por la furgoneta, ya decidieran dejarlo allí. Yo estuve dudando si seguir hasta Luz Ardiden como estaba previsto, y al acordarme de que en 2012 desistí, pensé que me iba a arrepentir si no lo hacía, por lo que para no fastidiarles mucho, les dije que yo seguía pero que me esperaran el camping.



Ya que estaba solo, en vez de subir por la vertiente clásica, decidí probar la de Vicos, que sobre el papel tenía buena pinta, pero una vez allí no merecía tanto la pena. De todas formas, conectaba con la principal a 4 km de la cima, que justo es la parte más espectacular del puerto, por su trazado en zig zag, y que pese a que en 2016, sí que lo subí, no lo recordaba para nada. (Puede ser que hubiera niebla?).De hecho, la tarde anterior vimos en Lourdes una imagen supuestamente de este tramo que no identificaba, pero finalmente pude encontrar el punto de vista desde donde se tomó.



Subida tramo final Luz Ardiden.


Cima de Luz Ardiden.

CLIC AQUÍ PARA VER RUTA: Col de Tentes + Luz Ardiden

Una última foto en el cartel de la estación, que tampoco estaba en 2016, y de vuelta al camping, quedándome unos 20 km después de terminar el descenso. Paré en un puesto a comprar una coca cola, coincidiendo justo con el grupo que nos hizo la foto en la cima del Aubisque. Estaban comentando lo chula que estaba la subida a Pont d`Spagne, que justo había programado para hacer el jueves por la tarde, pero que tuve que renunciar, por los dolores. Así que se me pusieron los dientes largos, y aunque pensar en hacerlo en bici era ya demasiado, propuse acercarnos a verlo en la furgoneta, pero el personal estaba pesando más en descansar y solo Juan se animó.

Y la verdad es que fue un acierto subir motorizado, y que aunque efectivamente la subida tenía su interés, como todas las de esta zona, el acceso a  Pont d`Spagne  propiamente dicho, estaba restringido, pudiendo acceder solo a pie. Así que aparcamos y nos pusimos de camino, quedando alucinados con la impresionante cascada que nos encontramos.


De vuelta al camping, dejamos todo preparado para la prueba y nos fuimos a dormir prontito. A las 6:30 estábamos listos en la línea de salida, y a las 7:00 en punto, nos poníamos en marcha, rodando rápido los primeros kilómetros hasta Luz Saint Sauveur, para empezar a subir el Tourmalet. 

Salida de La Pyreennene

Como  no tenía molestias, subía relativamente cómodo, aunque tampoco podía apretar mucho más. Eché cerca de dos horas y  a parte de volver a repetir lo de que no es el  puerto más duro, ni el más largo, ni el más alto, ni el más bonito, es simplemente el Tourmalet, además en esta ocasión, la niebla nos regaló unas impresionantes vistas sobre el valle.


Parte final del Tourmalet

Tras la foto en el monumento, donde pude coincidir con Jesús Reyes, iniciamos el vertiginoso descenso hacia Sainte Marie de Campan, llevándome un pequeño susto en una de las galerías al pensar que podría estar húmedo el asfalto y no querer frenar en la curva con lo que casi me voy contra el muro.

Ya en el valle, giro a la derecha en el punto de bifurcación entre la corta y la larga, para iniciar la subida del Aspin, en la que solo supone cierta dificultad los tres últimos kilómetros. Jesús paró en el avituallamiento de la cima algo más de tiempo, y le dije que iba tirando para abajo. Tras el descenso, camino a Saint Lary metido en un grupito, cogimos a Jesús Caro que iba solo, justo lo que le había advertido que no tenía que hacer. En el siguiente avituallamiento volví a parar, mientras que  Jesús siguió, y aunque llegué a verle en las primeras rampas del Hourquette d’Ancizan, ya se me despegó definitivamente. Tampoco llegaban por detrás Jesús Reyes, lo que me extrañaba porque andaba muy fuerte los días previos, ni Juan, que suponía que estaba tratando de ahorrar batería todo lo posible. Sergio se había ido para adelante desde el principio y no pude verle el pelo en todo el camino.

En la cima, otra parada en el avituallamiento, y descenso dejándome caer hasta llegar de nuevo al valle, haciendo un buen tramo esperando a que llegara algún grupo, pero cuando lo hizo me pilló de nuevo avituallando, y como ellos no pararon, tocó darme un calentóncito para coger rueda.  Lo conseguí y ya me llevaron hasta el inicio del muro de Neulich, que aunque no era tan duro como se suponía, se hizo algo largo. Me quedaba aún 20 km para Argeles Gazost, y como habíamos recibido un comunicado de la organización de que allí se tomaría el tiempo, y que sería válido para la clasificación en la 4 Valles, independientemente de estar inscrito en la 4 Valles Xtrem, empecé a pensar que ya estaba bien lo hecho, pues saldrían 170 km y 3.800 m+. Pero por otro lado, si subía Hautacan, poder volver a decir que había terminado una prueba tan extrema, me motivaba…así que con este dilema, me planté en los km finales, pero el repechito ya en Argeles Gazost, poco antes de meta, me costó bastante, lo que indicaba que iba muy al limite….

Y finalmente, no hubo nada que decidir, resulta que no me había enterado de que había un corte horario, y que si se sobrepasaba, ya no se podía continuar en carrera, y hay que reconocer, que cuando me pararon, la primera reacción fue de alivio. Seguro que a mi ritmo, con el 46 x 44, hubiera llegado al final, pero me habría supuesto dos horas más de sufrimiento, y como Hautacam sí pude subirlo en 2016, tampoco había tanta necesidad.


En meta me encontré con Juan, que había decidido hacer la corta, y visto lo visto, puede que hubiera sido lo más acertado, y poco después llegó Jesús Reyes. Jesús Caro, y por supuesto, Sergio, habían pasado el corte, así que nos fuimos a comer mientras los esperábamos.

Allí empecé a cuestionarme  si ya tenía que empezar a pensar en renunciar a hacer este tipo de pruebas tan exigentes, o por el contrario, volver a insistir, hasta que me enteré mejor de lo que había pasado. El corte estaba fijado a las 15:15, lo que implicaba un tiempo de 8:15, y según strava, mi tiempo en movimiento fue de 8:02 y el total de 8.14, por lo que tuvieron que cerrarme el paso por cuestión de segundos…

CLIC AQUÍ PARA VER RUTA: La Pyreennene 2025

A modo de despedida, tenía reservada la subida a Cap de Long, que tanto me impresionó en 2016, y aunque había incluido también el paso por Val Louron, teniendo en cuenta el cansancio y que tras terminar nos íbamos directos para Jerez, optamos por recortar y no subir este último.

Salida desde Saint Lary Soulan

La salida desde Saint Lary, dirección España siempre picando hacia arriba, hasta tomar el desvío hacia la reserva natural de Nèuvielle, donde comienza verdaderamente el puerto, que conforme subíamos, me resultaba bastante más duro de lo que recordaba. Le dije  a Juan que se adelantara para hacernos fotos en la serie de curvas que había a unos 5 km de coronar, pero tras pasarlas, nos encontramos la carretera cortada por obras justo en el cruce hacia el Lac d’Aumar.

Inicio subida a Cap de Long

"Lacets" de Cap de Long

Como en realidad había estado barajando hacerlo también ya que esta otra subida no la conocía, cogimos el desvío y aunque se alargó algo, y se había formado algo de niebla, al superar la cota de los 2.200 m, se despejó todo con lo que pudimos contemplar la mágnífica vista del lago, que aunque un puntito menos que la de Cap de Long, nos permitió cerrar de muy buena forma la expedición.


Subida a Lac d’Aumar.


Lac d’Aumar.

Bajamos con algo de prisa, volvimos a recoger todo, y nos pusimos en marcha con unas 12 horas de carrera por delante.

CLIC AQUÍ PARA VER RUTA: Reserva de Néuvielle

En definitiva, muy buena experiencia en general, consiguiendo cumplir buena parte de los objetivos marcados, y contento por ver la ilusión que les hizo a los compañeros subir estos puertos míticos y conocer estos impresionantes parajes.

En cuanto a los números, un disparate total: 556 km y  13.800 m+…

Durante el viaje de vuelta, tuvimos mucho tiempo para hablar de posibles retos para el 2026, que ya se irán concretando, pero todavía queda bastante  2025 para hacer algunas cosillas más, que seguiré contando por aquí.





No hay comentarios:

Publicar un comentario